Ayer tarde, durante el segundo día del triduo de coronación de Nuestra Señora del Carmen Reina de las Huertas, una nutrida representación de la hermanda de la Soledad se desplazó hasta San Sebastián para acompañar a nuestros hermanos carmelitas en un templo en el que tuvimos nuestra sede durante veinte años.
Al finalizar la Eucaristía, nuestro hermano mayor hizo entrega de un regalo para la Madre del Monte Carmelo. Se trata de un escapulario en terciopelo con bordados en oro, que representa un ánfora de azucenas. Los bordados los han realizado un grupo de hermanas soleanas y nuestro propio hermano mayor. En la parte interior de este escapulario se puede leer un bordado alusivo a la entrega de este regalo.
Además, los hermanos carmelitas anunciaron allí mismo que la Reina de las Huertas lucirá este presente el mismo sábado en su coronación canónica. Mil gracias, hermanos.
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